Lo más frustrante fue cuando viajar al extranjero, pues no pude comunicarme mucho con las personas. Por mucho que me esfuerzo en aplicar mis conocimientos de gramática, el hablar coloquial parecía bastante diferente a las estructuras gramaticales que tanto me habían costa de aprender en la escuela. Podía entender un poco la gente pero nadie me entendía a mí. Incluso algunas personas me habían dicho: “Joanjo, you are son funny: You speak like a book”

No fue hasta el mi segundo viaje al extranjero que empecé a desarrollar mis habilidades hablando inglés. Necesité una inmersión lingüística para hacerme entendre.Finalment el inglés me gustó tanto que decidí abrir mi propia escuela de idiomas en 1.991 (Hello! School), donde aplicaba los mismos métodos de enseñanza tradicionales. No era consciente, pero estaba creando el mismo ambiente frustrante que sufrí yo mismo. Debido a la recesión económica del 1993, tuve que cerrar la escuela.
Fue muchos años después, cuando estudié francés, que el maestro nos hizo hablar a todo el grupo ya el primer día. Me negué porque no tenía ni vocabulario ni gramática, pero la segunda semana ya no tenía excusa. Empecé presentándome a la clase, algo muy simple, pero así es como experimenté el aprendizaje de idiomas de manera natural. Me sentí tan entusiasmado que empecé a querer mucho el francés. Me puse la meta que en 6 meses hablaría con facilidad. Y qué pasó? …. Casi lo consigo. Tardé un poco más, pero en el viaje de aprendizaje de idiomas no importa el tiempo, lo importante es conseguir llegar al destino. Juan José Ozcáriz. Fundador de EasyTalk

Entrevista director EasyTalk